Los municipales despedidos de Lago Puelo iniciaron una huelga de hambre

ANTE LA FALTA DE UNA MESA DE NEGOCIACIÓN, ESCALA EL CONFLICTO EN LA LOCALIDAD CORDILLERANA

Los empleados municipales de Lago Puelo que fueron despedidos el 31 de diciembre del 2012 comenzaron esta semana una nueva etapa de su plan para que el intendente de la localidad, Iván Fernández, de marcha atrás con la decisión. Desde el día lunes comenzaron con la medida extrema de “huelga de hambre”. Hasta el momento, la mediación del gobierno provincial a través de la Secretaría de Trabajo no se llevó a cabo a pesar de las gestiones del ex intendente local y actual diputado provincial, Eduardo Daniel.
Hay que tener en cuenta que desde el primer día hábil de enero de este año, alrededor de 15 empleados municipales tomaron el corralón de la comuna local como forma de reclamo ante el despido de cuatro empleados que estaban bajo la modalidad de contratos temporales desde hacía al menos dos años. Según denunciaron en ese momento los trabajadores del municipio, los despidos decididos por el intendente Fernández obedecían a una política de “persecución” a los empleados que se encomendaron a la tarea de formar un sindicato. “De los cuatro que fueron despedidos dos están dentro de los trabajadores elegidos por la asamblea para conformar las autoridades gremiales; lo que demuestra la decisión autoritaria que tomó el intendente”, explicó Adrián Samaniego en diálogo con El Diario, uno de los despedidos y que desde el último lunes está bajo el régimen de huelga de hambre.

“Callejón sin salida”

Ante las declaraciones de Fernández de que la situación estaba en un “callejón sin salida” y la necesidad de que alguien intercediera para llegar a un acuerdo, Samaniego explicó que a pesar de las promesas de que el secretario de Trabajo, Marcial Paz, iba a conversar telefónicamente luego de que se destrabara la situación de las comunidades de la meseta que estaban con problemas laborales a partir de los despidos en la empresa minera, el contacto aun no se hizo. La situación del municipio favorecería en su gran mayoría al actual intendente ya que de los 160 empleados promedios que tiene la comuna sólo estarían llevando medidas de fuerza quince trabajadores. Sin embargo, los empleados tienen una posición que los fortalece: hace casi un mes que ocupan el corralón municipal y no pueden salir los vehículos de obras públicas. Esto trae otro problema aparejado: el municipio tuvo que contratar un servicio de recolección de residuos para evitar el descontrol de la basura en el pueblo.

Sin mesa de negociación

“Lo cierto es que nadie quiso escuchar nuestros reclamos y ahora se ven en esta situación que ellos consideran sin salida. Es mentira el argumento del gobierno sobre que redujeron la planta de empelados por cuestiones presupuestarias; porque al mismo tiempo que dieron por terminado el contrato de nosotros, incorporaron otros dos empleados”, explicó Samaniego. Igualmente, desde la comuna de Lago Puelo aclaran que la decisión terminó obedeciendo al desempeño laboral de los cuatro trabajadores.
Si bien el diputado provincial por el Frente para la Victoria, Eduardo Daniel, y también ex intendente de Lago Puelo, había confirmado a El Diario que realizó gestiones para tratar de destrabar el conflicto, sobre todo recurriendo al funcionario laboral de la provincia, por el momento la situación está en la misma que la semana pasada. No existe ninguna mesa de negociación entre el municipio y los trabajadores que mantienen medidas de fuerza, y los dirigentes de provincia no intervinieron por el momento. De hecho la situación sólo tiende a agravarse: desde la semana pasada, los quince empleados que toman el corralón municipal se vieron rodeados por personal de infantería de la Policía del Chubut: “Es una medida claramente intimidatoria”, explicó Samaniego, uno de los que lidera a los trabajadores despedidos.    

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