Pesca: a último momento se cayó el acuerdo salarial y el conflicto vuelve a quedar muy cerca

El gremio no quiere esperar hasta 2013 para que el aumento vaya al sueldo básico. Sorprendidos, los empresarios les piden que recapaciten.


Frustrado. Maisterra, titular de la CAPIP, no se explica lo que sucedió.
Cuando todo estaba encaminado para firmar el acuerdo salarial, los nubarrones del conflicto volvieron al sector pesquero. A última hora del viernes las negociaciones entre el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación y la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras se estancaron sin posibilidad de avance ni destrabe.


Los montos salariales del acuerdo estaban consensuados pero a último momento surgieron desavenencias sobre el tiempo que las empresas pretendían tomarse para pasar al básico de los empleados la suma no remunerativa acordada. La propuesta era de mil pesos, que progresivamente se abonaría para luego volcarse en etapas al salario básico.


A lo largo del día se superaron los puntos menores del acuerdo que se consensuaron previamente. Pero pasadas las 21 todo se empantanó cuando la CAPIP modificó un punto relacionado con el plazo para aplicar los montos no remunerativos al salario básico. “No aceptamos que los no remunerativos sean pasados al básico durante todo el año” dijo Luis Núñez, secretario general del STIA, quien dejó abierta la puerta a un conflicto gremial.


“La CAPIP no quiere volcar el dinero de las sumas no remunerativas al básico hasta mayo de 2013. Es un verdadero impedimento que no estamos en condiciones de aceptar”, añadió. El fin de semana habrá asamblea de delegados de la provincia para decidir los pasos a seguir. La sombra del conflicto está latente ante la liberación de las partes y el estancamiento de las negociaciones a último momento.


El gremio advirtió que mañana los dirigentes se reunirán con los empresarios que están por fuera de la Cámara para avanzar en la firma del acuerdo que iba a celebrarse el viernes por la noche y que se cayó a último momento. Un punto esgrimido por los empresarios es que sus plantas queden ajenas ante un potencial conflicto en el sector pesquero, ya que ellos avanzarían en el acuerdo pretendido por el gremio.


Por su parte, la Cámara se mostró sorprendida por lo sucedido y por el intempestivo fracaso de las negociaciones salariales. El desenlace fue categórico y “frustrante” para los representantes de las plantas pesqueras, quienes llamaron a la reflexión de los sindicalistas para poder celebrar a la brevedad un acuerdo beneficioso para las partes.


“Creíamos que el viernes a la noche firmábamos porque el acuerdo fue pensado a lo solicitado por el STIA en su momento”, dijo Eduardo Maisterrena, gerente de la Cámara. “Se buscó tratar de poner la mayor cantidad de cifras no remunerativas para que no le afectara el salario familiar y el impuesto a las ganancias”.


Con estas dos premisas se sentaron las partes a negociar y durante más de 30 días se limaron las diferencias aunque aparecieron a último momento para impedir la firma.


“En un principio el STIA aceptó la propuesta y a último momento cambiaron de parecer” dijo el representante empresarial, quien lamentó todo lo sucedido porque se dejaron atrás varias semanas de intensas negociaciones.


Maisterrena aclaró que lo propuesto “es lo mismo que se firmó el año pasado” añadiendo que el acuerdo se elaboró “en función a los pedidos que efectuó el sindicato en las primeras negociaciones”.


Uno de los aspectos centrales, esgrimidos por el sector empresarial, está relacionado al hecho de que el punto conflictivo no estaba en discusión porque ya había sido aceptado con anterioridad. Desde la CAPIP se advirtió que “hicimos todo el esfuerzo posible para llegar al número pretendido y en la forma que el gremio solicitaba”, dijo el gerente. Asimismo, advirtió que “ante la crisis que existe en la pesca, que es muy grande y se agrava por los costos, hicimos el mayor de los esfuerzos. Esperamos que recapaciten y acepten el aumento que es el monto que ellos querían”. Los miembros de la Cámara tienen el deseo íntimo de poder cerrar el acuerdo el día lunes aunque la realidad indica que el panorama es muy sombrío y que el futuro podría estar trazado por nuevos conflictos en las empresas ligadas a la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras.#


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